El pasado 11 de marzo los colombianos asistieron a las urnas para elegir a quienes serán los nuevos miembros del Congreso – 102 escaños del Senado y 166 curules de la Cámara de Representantes – en una elección que será la antesala a las elecciones presidenciales en el mes de mayo.

Fue la primera vez en 50 años que la cuarta economía de Latinoamérica acudió a las urnas sin la amenaza de los grupos rebeldes. Se trató de una contienda electoral donde la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, el partido de la antigua guerrilla de las FARC surgido de los acuerdos de paz con el Gobierno de Juan Manuel Santos, se presentó como una alternativa parlamentaria por primera vez en la historia de Colombia.